Autor: Arthur Conan Doyle
Editorial: Anaya. Madrid, 1994.
Generalmente, se entiende por ciencia ficción el producto de la
imaginación del autor que se proyecta en el porvenir, que anticipa en el
presente de la acción del relato un futuro más o menos lejano y que encuentra
en una cierta base científica su garantía de verosimilitud. En "El Mundo
Perdido" la pirueta imaginativa toma la dirección contraria y se dirige
hacia un remoto pasado que se hace presente en el argumento novelesco.
Así, un extravagante científico organiza una expedición para probar al mundo su descubrimiento de la supervivencia de dinosaurios en un lugar de difícil acceso de Sudamérica; algo así como un viaje desde el siglo XX al Jurásico.
En la novela, uno de los intentos desesperados del autor por librarse de la alargada sombra de su personaje Sherlock Holmes, hay humor, misterio, intriga y, sobre todo, aventura en estado puro. Como escribió el propio Conan Doyle, el libro está destinado "al muchacho que es a medias un hombre o al hombre que es un muchacho a medias".
Publicado en el Diario Montañés
Así, un extravagante científico organiza una expedición para probar al mundo su descubrimiento de la supervivencia de dinosaurios en un lugar de difícil acceso de Sudamérica; algo así como un viaje desde el siglo XX al Jurásico.
En la novela, uno de los intentos desesperados del autor por librarse de la alargada sombra de su personaje Sherlock Holmes, hay humor, misterio, intriga y, sobre todo, aventura en estado puro. Como escribió el propio Conan Doyle, el libro está destinado "al muchacho que es a medias un hombre o al hombre que es un muchacho a medias".
Publicado en el Diario Montañés
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