Autor:
Erich Kästner
Traductora:
Carmen Seco
Ilustrador:
Walter Trier
Editorial:
Alfaguara, Madrid, 2002 8,50 €
La primera mitad
del siglo XX fue pródiga en alianzas entre países, conferencias políticas y
tratados de paz. Estos eventos no solo evitaron guerras sino que se
convirtieron en formidables instrumentos para provocarlas. Tanto la Primera
como la Segunda Guerra Mundial estuvieron jalonadas por numerosos de estos
tratados, conferencias y alianzas.

Aunque la
alegoría hace referencia a una situación europea concreta, el mensaje
trasciende esta época para convertirse en
una denuncia universal contra el belicismo, la negociación desde
posiciones de fuerza y la sinrazón de quien se cree cargado de razones.
Kästner,
comprometido con el pacifismo, utiliza la sátira, la caricatura, la ternura y
el humor para diseñar un mundo más amable. Las ilustraciones amenizan la
lectura en línea con el tono humorístico que destila el texto. Y de este modo la
fábula se va desplegando magistralmente apoyándose en su destreza narrativa, su
propia sencillez y la claridad y
concisión de su estilo.
Erich Kästner
nació en Dresde (1899) y fue reclutado para la Gran Guerra en 1917. Tan dramática
experiencia tuvo una influencia decisiva en su posterior trayectoria
intelectual y como antimilitarista. Inició estudios de magisterio pero pronto
se dedicó al periodismo y a la literatura con poemas, ensayos y novelas para
niños y adultos. En 1928 publicó Emilio y
los detectives. En estos años era
uno de los intelectuales más relevantes
de aquel Berlín efervescente. Con
el ascenso del nazismo sus libros fueron prohibidos y quemados, pero continuó
viviendo en Alemania. Recibió el Andersen en 1960. Murió en Munich en 1970.
(Publicado en Peonza nº 115. Diciembre de 2015)