viernes, 13 de diciembre de 2013

Elemental queridos humanos (Vida y andanzas del ingenioso planeta Tierra)



Autores: Juan Luis Arsuaga y Milagros Algaba
Dibujos: Forges
Editorial: Temas de Hoy. Madrid, 2010. 18,50 €

La hª del hombre es una parte pequeña, una diminuta muñeca rusa, alojada en una un poco más grande que sería la hª de los homínidos, que a su vez encaja dentro de la de los mamíferos; éstos en los vertebrados terrestres, éstos en los peces, éstos en los cordados,.. y desde aquí, dando un gran salto de numerosas muñecas todavía poco conocidas nos ubicaríamos dentro de la hª de los metazoos, que a su vez encajarían dentro de los seres vivos capaces de reproducirse, éstos dentro de los seres vivos capaces de autocopiarse y así llegaríamos a la esencia y origen de la vida (ADN).


 
El lector habrá descubierto que estamos hablando de la evolución, pero no como una secuenciación lineal de especies, sino como un desarrollo en forma de árbol; nosotros seríamos una cualquiera de las ramas o quizás una de las hojas de esa rama.

Pero a su vez ese árbol formaría parte de una envoltura mayor que sería la Biosfera, ésta de la Hidrosfera, y ésta de la Atmósfera, formando así un todo al que llamamos Tierra. Sin olvidar el papel que en la formación de todo ello ha jugado la Litosfera, esa corteza con sus grietas y sus movimientos constantes y su constante tapar y destapar el material incandescente que fluye del interior de la Tierra.

Globalmente concebido nuestro planeta se comporta como un superorganismo vivo que se autorregula y al que le ocurrió algo excepcional hace miles de millones de años: le nació vida. Desde entonces la actividad de los distintos organismos ha ido creando las condiciones ambientales en las que nosotros, la especie Homo Sapiens, vinimos al mundo. Pero desde hace muy poco tiempo, unos diez mil años, esta especie inauguró un nuevo modo de comportarse; en vez de adaptarse al entorno, empezó a modificarlo en su beneficio…

Audaz planteamiento el de éste libro que coloca al hombre en su sitio y al lector en el lugar del testigo que ahonda en la reflexión de Nietzsche cuando hace más de un siglo consideraba que este hermoso lugar llamado Tierra tenía una enfermedad llamada hombre.

Los autores conducen al lector por un apasionante y vertiginoso recorrido a través de la historia de la Biosfera desde sus orígenes hasta nuestros días haciendo especial hincapié en la relación del hombre con la Tierra. 

Las ilustraciones de Forges, con sus disparates y ucronías, son el contrapunto humorístico de un texto ameno, interesante y riguroso que invita a la reflexión sobre el futuro de nuestro planeta y sobre la propia actitud personal ante el mismo. Un mensaje cobra cada vez más vigencia: “Piensa globalmente, actúa localmente”. 
(PM) Publicado en Peonza nº 97 (2011)

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