El tesoro del lago de la Plata

Autor: Karl May
Editorial Anaya. Madrid, 1991.

La sociedad alemana de la segunda mitad del siglo XIX y primera mitad del siglo XX  acogió de buen grado un tipo de literatura de evasión que le sirviera de escape; ésta fue la función que cumplieron las novelas de Karl May. Se trata de historias de viajes a lugares exóticos, plenas de acción y de aventuras que instalaron al autor en la cumbre de la fama. 
    

La obra que ahora comentamos es de las más características en cuanto a héroes, acción y escenarios ambientales. Los personajes unos, paradigmas de la bondad, otros, quintaesencia de la maldad, todos ellos sin fisuras, encadenan hechos heroicos que consiguen capturar al lector y colocarle en el centro del relato. Por aquí desfilan famosos hombres del Oeste americano, tramperos, indios, un ingeniero,... 
Como sus admirados maestros Emilio Salgari o Julio Verne, todos los protagonistas son masculinos. 

El hecho de que las obras de este autor estuvieran entre las lecturas favoritas de Hitler no deben añadir ni quitar valor a las mismas. 
El estilo (plagado de interjecciones) es ligero y sencillo, rasgo característico del género de acción. 
(P.M.) Publicado en el Diario Montañés